Ayer a las 21:00 se produjo un suceso poco habitual en Benidorm. En una vivienda de la Calle Ruzafa un perro se atrincheró en el cuarto de invitados de su domicilio porque no quería volver a salir a pasear. A la casa acudieron un amplio dispositivo consistente en 8 patrullas de la policía local, 2 de la policía nacional y dos vehículos de los bomberos.
Durante dos horas y medias estuvieron negociando con el canino que finalmente decidió abandonar su atrincheramiento llegando a un acuerdo con su familia. El problema se produjo cuando Thor se negó a bajar a la calle por decimocuarta vez al día sólo para que sus dueños pudiesen fumar y estirar las piernas "llevan una semana sin parar de bajar a la calle cuando lo que quiero es dormir y lamerme mis partes. Con tres veces que baje es suficiente pero estos espabilados bajan mínimo 10 y hoy ya se han pasado" relataba el perro a la gran cantidad de periodistas que estábamos allí congregados.
A partir de ahora la pareja dueña de Thor podrá bajarle tres veces al día y deberán turnarse entre ellos. El paseo será de 10 minutos máximo para que pueda hacer sus necesidades, oler culos y solo podrá ser ampliable este tiempo si el perro se encuentra a una perrita en celo. Estas medidas podían ampliarse cuando termine el periodo de Estado de Alarma por el Coronavirus.
La gata de la pareja, Dulcinea, al ser preguntada por uno de los compañeros ha declarado que está harta de unos y otros "antes como mucho sólo tenía que aguantar al tonto del perro cuando los humanos se iban y nos quedábamos solos pero cada uno por su lado. Pero ahora tengo que aguantar mucho más tiempo a esta panda de idiotas en mi casa, era cuestión de tiempo que alguno de estos personajes la liase"
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